Fake news

Escapar de la infoxicación

 ¿Agobio ante una ingente cantidad de información? ¿Desconcierto y parálisis derivados por un volumen inabarcable de información? Si sientes o has sentido alguno de estos síntomas es que padeces una infoxicación. Asegurar que estamos ante una de las enfermedades del sigo XXI puede resultar un tanto osado, pero sin duda podemos afirmar que es una de las más extendidas. Basta con tener un móvil a mano para poder enviar una información rápida, de forma fácil y que genere opinión en sus receptores. Recientemente, el periodista y escritor Arturo Pérez Reverte denunció el efecto que han tenido las redes sociales en el periodismo, asegurando que “lo han matado”.

Las nuevas tecnologías han allanado el camino de la comunicación, pero también han supuesto un escollo a las noticias bien elaboradas y contrastadas, generando un exceso de información, que en muchas ocasiones, resulta incompleta, sesgada o simplemente falsa.

Las noticias falsas, conocidas como ‘fake news’ han irrumpido en nuestras vidas creando el caos y la confusión. Este término, considerado la palabra del año por el diccionario Oxford, adquirió mayor protagonismo y popularidad gracias a Donald Trump, que durante su campaña hizo de ellas su herramienta defensora ante las acusaciones de su complicidad con Rusia.

En el territorio nacional, este término afloró en mayor medida a raíz del referéndum catalán del 1 de octubre al detectarse varias noticias falsas que intoxicaron el debate sobre la independencia de Cataluña. Se ha convertido en una preocupación más para el Gobierno central que ha anunciado recientemente, que realizarán desmentidos rápidos para evitar que se generalicen estas noticias falsas.

Hasta la propia ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha planteado unir a políticos y editores para ganar la batalla contra las ‘fake news’ pero contra esta marea de informaciones la mejor herramienta es el sosiego. Se debe huir del consumo ansioso de información, reflexionar, contrastar y digerir los datos para elaborar nuestro propia opinión y creencia al respecto. Esta es la mejor medicina para controlar o al menos paliar la infoxicación.

Compartir

Copiar enlace al Portapapeles

Copiar