El pasado incendio durante el verano en Tenerife nos demostró, una vez más, la creciente capacidad de las redes sociales y servicios de mensajería instantánea para difundir bulos y falsas noticias. Durante la pandemia de la covid, el volcán de La Palma o el reciente incendio de Tenerife hemos sido testigos de la proliferación de estas fake news. Y es que cada vez que ocurre una desgracia la vulnerabilidad de las personas para dar credibilidad a estos bulos se ve especialmente afectada.
Aunque la desinformación siempre ha existido, lo realmente preocupante hoy es cómo se propaga a una velocidad y alcance sin precedentes a través de plataformas digitales.
En este sentido, la desinformación es considerada un problema por el 95,8% de la población, tal y como refleja el Barómetro sobre la Desinformación realizado por Uteca y la Universidad de Navarra en junio de 2022. De hecho, siete de cada diez personas admiten que alguna vez se han creído un mensaje o vídeo que resultó ser falso. Asimismo, esta misma encuesta indica la coincidencia de un 80,9% de la ciudadanía en que la Televisión, la Radio y la Prensa son la mejor garantía frente a la proliferación de la desinformación.
Cada vez resulta más fácil ser víctima de un bulo dado el desarrollo de las nuevas tecnologías y de la inteligencia artificial, la cual ha ayudado a la propagación de estas fake news a través de imágenes trucadas que parecen muy realistas. Hoy cualquier usuario puede convertirse en un improvisado medio de comunicación, y ante este contexto, los periodistas, jugamos un papel clave frente a los bulos y falsedades.
Es por ello que debemos recordar el compromiso con el código ético y deontológico, una responsabilidad que asumimos en Metrópolis Comunicación en nuestro trabajo diario. Verificar las fuentes de información es una práctica no sólo crucial, sino que también asegura que la información que se maneja sea auténtica y fiable para el público.
La forma más rápida y sencilla de conseguir una fuente fiable es acudir a páginas webs oficiales. Otra opción, es la de acudir a testigos directos. El compromiso con el rigor y la información veraz, junto con la habilidad de evaluar fuentes de manera eficiente, son fundamentales para establecer un periodismo sólido y confiable, especialmente en un mundo mediático en constante cambio.
En Metrópolis somos conscientes de que la formación continua y adaptación a la transformación digital son imprescindibles en nuestra labor diaria como periodistas. Todo ello, nos ayuda a detectar e intentar frenar estas fakes news.
Asimismo, dado nuestro compromiso de servicio público, tanto si trabajamos para un medio de comunicación, empresa u organización nos esforzamos en colaborar y ayudar a desmentir estas falsas noticias. Ante los bulos, se hace necesario más periodismo.